Cómo los retailers pueden adaptarse a cambios en los hábitos de consumo agrícola
Los hábitos de los consumidores tienen una influencia significativa en las dinámicas del mercado, con varios factores como estándares de calidad, precios y prácticas de cultivo que moldean las decisiones de compra.
A medida que las preferencias de los consumidores evolucionan hacia la salud y la sustentabilidad, los minoristas enfrentan grandes desafíos, incluyendo la falta de previsión de la demanda, el riesgo de estancamiento, la pérdida de cuota de mercado y la reducción de las ganancias.
En este sentido, los minoristas deben mejorar su capacidad de adaptación y adoptar estrategias adecuadas, lo cual es esencial para anticiparse y responder eficazmente a la volatilidad en las demandas de los consumidores y prosperar en un mercado altamente competitivo.
¿Por qué y cómo cambian los hábitos de los consumidores?
La evolución de los hábitos de los consumidores es compleja debido a los múltiples factores que están en constante cambio.
El atractivo visual de los productos agrícolas, incluidos aspectos como forma, tamaño y color, impacta significativamente en las decisiones de compra, ya que es lo primero que suele notarse en este tipo de productos. La calidad aparente y el sabor de los productos desempeñan un papel crucial en la determinación de compras repetidas, siendo más probable que los consumidores compren productos que ya hayan cumplido antes con sus expectativas de frescura y sabor. Además, los consumidores buscan productos cada vez más frescos y de mejor apariencia.
El precio es otro factor clave que impulsa el comportamiento del consumidor. Los consumidores evalúan la calidad de los productos en relación con su precio, determinando si el valor percibido se alinea con lo que están dispuestos a pagar. Productos de calidad a precios competitivos tienden a atraer y retener a los clientes, fomentando la lealtad y las compras repetidas.
Los consumidores también se preocupan por cómo se cultivan sus productos. Aspectos relacionados a la salud, especialmente preocupaciones respecto al uso de pesticidas, influyen significativamente en la toma de decisiones de los consumidores. Según una encuesta realizada por el Consejo Internacional de Información Alimentaria (IFIC), el 91% de los consumidores toman en cuenta cómo se cultivan sus alimentos a la hora de realizar sus compras.
Además, el 60% de estos consumidores citan el uso de pesticidas como una de sus principales preocupaciones. El 71% de las personas que muestran esta preocupación por los pesticidas dice evitar verduras y el 59% frutas.
Otros factores que influyen en las preferencias de los consumidores incluyen el contenido nutricional, el uso de tecnología agrícola, la sostenibilidad ambiental, el uso de recursos naturales y el bienestar de los trabajadores agrícolas.
En los últimos años, ha habido un cambio notable en las preferencias de los consumidores hacia opciones más saludables y sustentables. El aumento en la conciencia sobre los beneficios para la salud asociados con los productos frescos, junto con las preocupaciones sobre el impacto ambiental y las consideraciones éticas, han incrementado esta tendencia, y por ende, los productos orgánicos han ganado popularidad.
Los consumidores están buscando activamente productos que se alineen con sus valores, priorizando la salud, la sostenibilidad y las prácticas de producción ética, por lo que los actores de la industria deben adaptar sus ofertas para satisfacer estas expectativas y ayudar a lograr una cadena de suministro más sustentable.
Los desafíos que enfrentan los minoristas de productos agrícolas
Para los minoristas de productos agrícolas, adaptarse a los cambiantes hábitos de consumo representa grandes desafíos que pueden afectar su resultado final y su posición en el mercado. Aquí están algunos de los principales obstáculos que enfrentan:
Falta de previsión de la demanda y de suministro estable
Anticipar qué tanto de cada tipo de producto agrícola demandarán los consumidores es sumamente complicado. Sin una previsión precisa de la demanda, los minoristas corren el riesgo de tener exceso o falta de inventario, lo que lleva a ineficiencias en la gestión de la cadena de suministro, estrategias de precios poco óptimas y esfuerzos de marketing desalineados. La falta de herramientas de previsión confiables puede resultar en oportunidades de venta perdidas y costos incrementados asociados con el exceso de inventario o ventas perdidas.
Pero incluso con las herramientas y datos necesarios para tener una previsión confiable, la realidad en los productos agrícolas es que eventos impredecibles como el clima, plagas o disrupciones en la cadena de suministro, siempre pueden alterar la disponibilidad del suministro. Por lo tanto, la misión de ofrecer a los clientes un suministro estable y de calidad de frutas y verduras, se complica aún más.
Riesgo de estancamiento y pérdida de cuota de mercado
Los minoristas que no se adapten a las cambiantes preferencias de los consumidores corren el riesgo de quedarse atrás respecto a sus competidores. El estancamiento puede llevar a una pérdida de relevancia y cuota de mercado, ya que los consumidores se inclinan hacia minoristas que ofrecen productos que se alinean con sus necesidades.
Además, como los consumidores buscan cada vez más alternativas para reducir su gasto total, los minoristas enfrentan el desafío de retener su cuota de mercado en medio de una competencia intensa.
Según los últimos análisis de Future Consumer Index, el 54% de los consumidores globales planean reducir sus futuras compras, mientras que el 57% expresan preocupaciones sobre el creciente costo de los comestibles y artículos esenciales para el hogar. Esto representa una amenaza significativa para los minoristas, quienes requieren medidas proactivas para retener y atraer clientes en un mercado tan competitivo.
Reducción de la rentabilidad
La combinación de posibles disminuciones de ventas, pérdidas de alimentos y mayor competencia puede afectar los márgenes de beneficio de los minoristas, perjudicando su desempeño financiero.
Los minoristas de productos agrícolas deben encontrar formas de optimizar sus operaciones, minimizar costos y mejorar su eficiencia para proteger la rentabilidad frente a estos desafíos.
Estrategias para adaptarse a cambios en hábitos de consumo
En respuesta a los desafíos que plantean los cambios en los hábitos de los consumidores, los minoristas de productos agrícolas pueden implementar iniciativas estratégicas para mantenerse competitivos y satisfacer las necesidades en evolución de los consumidores. Aquí hay algunas estrategias efectivas:
- Mejorar la previsión de la demanda y asegurar un suministro estable: Los minoristas pueden aprovechar la recolección de datos, investigación del mercado y mecanismos de retroalimentación de los consumidores para mejorar su comprensión de las preferencias y comportamientos de los consumidores.
Al invertir en herramientas y técnicas sólidas de previsión de la demanda, los minoristas pueden anticipar mejor las fluctuaciones en esta para optimizar la gestión de su inventario, así como alinear sus operaciones de la cadena de suministro con las tendencias de los consumidores. Este enfoque proactivo permite a los minoristas minimizar la falta de inventario, reducir los costos por exceso del mismo y mejorar la eficiencia operativa general.
Además, al optimizar la cadena de suministro, se pueden generar asociaciones de valor agregado y mejorar la comunicación directa con proveedores para evitar desajustes entre la oferta y la demanda. Con esto, los minoristas no sólo aseguran un suministro estable de productos frescos durante todo el año para sus clientes, sino que también se vuelven más competitivos y evitan desperdicios tanto económicos como de alimentos. - Equilibrar productos saludables con precios estables: Los consumidores están dando cada vez más prioridad a la salud y la sustentabilidad. Sin embargo, la volatilidad inherente de los precios en la industria agrícola y los elevados costos de las prácticas sustentables pueden seguir siendo un desafío. Los minoristas pueden diferenciarse ofreciendo una amplia gama de productos de alta calidad y nutritivos a precios competitivos y estables durante todo el año.
Además, los minoristas deben garantizar el equilibrio adecuado de productos saludables y asequibles. Permanecer ágiles y receptivos al comportamiento del consumidor ayuda a mantenerse competitivos, obtener una base de clientes más amplia, aumentar las ventas y ganar lealtad de los consumidores. - Asociarse con proveedores sustentables: Colaborar con proveedores que se adhieren a prácticas agrícolas sustentables y normas éticas permite a los minoristas satisfacer más fácilmente la creciente demanda de productos ambientalmente amigables y socialmente responsables.
Al expandir su red de proveedores sustentables, los minoristas pueden mejorar la calidad y las credenciales de sustentabilidad de su ofertas de productos y atraer a los consumidores conscientes del medio ambiente.
Este enfoque de asociaciones estratégicas fomenta relaciones a largo plazo con los proveedores, promueve la transparencia y apoya la transición hacia una cadena de suministro de productos agrícolas más sostenible y resiliente. - Optimizar suministro, almacenamiento y entrega: Asegurar la disponibilidad constante de productos de alta calidad y la entrega oportuna a los clientes es esencial para construir confianza y lealtad. Los minoristas pueden optimizar su cadena de suministro, instalaciones de almacenamiento y logística de entrega para minimizar el desperdicio de productos, mantener la frescura y cumplir con las expectativas de los clientes en cuanto a conveniencia y confiabilidad.
Al invertir en soluciones tecnológicas como el seguimiento en tiempo real, almacenamiento controlado por temperatura y redes de transporte eficientes, los minoristas pueden mejorar su eficiencia operativa, reducir costos y ofrecer mejores productos. Este enfoque centrado en el cliente permite a los minoristas fortalecer su competitividad, impulsar el crecimiento de las ventas y adaptarse a los hábitos cambiantes de los consumidores.
Cómo ProducePay asegura la predictibilidad para el éxito de los minoristas
En ProducePay, entendemos el papel que juega la predictibilidad en ayudar a los minoristas contra las incertidumbres en la demanda de los consumidores y las cambiantes dinámicas del mercado. Por eso, nos asociamos con los principales productores y comercializadores agrícolas del mundo para construir programas que integren toda la cadena de suministro.
A través de nuestros Programas de Comercio Predecible, alineamos la demanda de los compradores con los puntos de suministro de los productores, permitiendo a los minoristas asegurar un suministro todo el año, lo que mejora su competitividad y les ayuda a satisfacer las demandas cambiantes de los consumidores de manera confiable.
Al integrar toda la cadena de suministro y aprovechar nuestra red global de productores sustentables, creamos predictibilidad que asegura la disponibilidad de productos de calidad a precios estables.
Además, ofrecemos acceso a capital, tecnología y visibilidad mejorada que contribuyen a una cadena de suministro más transparente y conectada, por lo que agricultores y compradores pueden colaborar y comunicarse de manera más efectiva.
Fuentes: FAO, IFIC, Food Navigator