La necesidad como motor para la innovación en el sector agrícola
Es interesante como Israel, siendo un pequeño país con nulas condiciones para la agricultura (y obviando aquí cuestiones sociopolíticas), se ha convertido en el referente mundial cuando hablamos de innovación agrícola; además, históricamente en este país se han creado empresas relacionadas con agricultura que han adquirido gran relevancia mundial, y cada año surgen nuevas startups que buscan seguir innovando.
Mientras tanto, en América Latina, donde existen muchas regiones con condiciones adecuadas para la producción, innovamos realmente poco en agricultura, y no solo eso, pues también innovamos a un ritmo bastante lento, algo que necesita comenzar a cambiar.
Entiendo que hablar de innovación agrícola implica poner sobre la mesa un tema que requiere un análisis exhaustivo de los elementos que la impulsan o limitan, pero en esta ocasión sólo quiero indicar un punto que me parece bastante obvio al respecto: tener una necesidad es una de las claves para innovar, quizá la más importante de todas las que puedan existir, porque sin una necesidad clara y urgente no se innova.
Por ejemplo, en México contamos con una buena cantidad de recursos naturales (al menos en comparación con Israel), por lo que en muchas regiones productivas del país no hay que ingeniárselas demasiado para producir, dado que lo que se necesita está ahí mismo, fácilmente disponible, lo que a su vez hace que la producción se facilite, o al menos que no parezca imposible, como lo es producir en un desierto.
Aunque claro, incluso en nuestro propio país podemos observar este fenómeno: los estados del sur, con más recursos disponibles, son los de menor adopción de innovaciones tecnológicas, siendo además los estados con mayor superficie de agricultura de temporal, que como bien sabemos, está mucho más expuesta a los cambios climáticos. Mientras tanto, en el norte del país, con recursos más limitados, la producción agrícola debe valerse de tecnología, de modo que siempre están buscando qué innovaciones se pueden implementar para maximizar la rentabilidad.
Entonces, desde el punto de vista de la mejora agrícola, tener una necesidad a la cual no se le pueda sacar la vuelta, podría resultar algo extremadamente positivo, porque cuando no existe una necesidad urgente, entonces no hay prisa por mejorar, y en ese momento la innovación se deja de considerar como algo importante.
Y para quienes se dedican a la agricultura, la mayor necesidad de todas está a la vuelta de la esquina, porque producir “como siempre se ha hecho” está dejando de ser una alternativa, en especial considerando que los consumidores comienzan a pedir que la agricultura migré a sistemas de producción sustentables, es decir, pronto dejará de ser válido producir la mayor cantidad de alimento posible, sin importar lo que se tenga que hacer, porque los tiempos están cambiando y el sector agrícola deberá adaptarse a producir lo más posible con la menor cantidad de recursos, respetando el medioambiente y cuidando los ecosistemas, procurando el bienestar de los trabajadores y sus comunidades, aumentado los estándares de calidad e inocuidad, al tiempo que se garantiza la trazabilidad, por mencionar solo lo que los consumidores ya están exigiendo en estos momentos.
Por supuesto, el tema de la innovación es complejo y cada profesionista y empresa del sector agrícola debe hacer lo posible desde su posición. En este sentido, en Produce Pay conocemos las necesidades que tienen los agroexportadores en cuestiones de financiamiento, lo que nos ha llevado a crear productos que realmente resuelven dichas necesidades, productos que complementamos con información estratégica del mercado, generada con herramientas de data science.