Volatilidad en la industria agrícola: impacto y estrategias para combatirla.
La volatilidad en la industria agrícola ha sido históricamente un fenómeno de gran relevancia, que en los últimos años ha tenido un impacto todavía más significativo en todos los eslabones que conforman las cadenas de suministro, desde los productores hasta los compradores finales. Tan solo en la Encuesta Anual de la Industria 2023 de ProducePay, el 83% de los participantes mencionan la volatilidad en el precio de los productos como uno de los principales problemas para sus negocios.
Dicha volatilidad se traduce en cambios bruscos y a gran escala en los precios de los productos agrícolas, lo que está generando una profunda incertidumbre en cuanto al precio de venta de éstos, afectando de manera directa la rentabilidad de los agronegocios.
El origen de la volatilidad en la industria agrícola proviene de una compleja combinación de factores estructurales que incluyen eventos climáticos extremos, la demografía mundial, la evolución de los mercados internacionales y disrupciones en la cadena de suministro por problemas relacionados a la logística y mano de obra. Además, las tensiones geopolíticas también desempeñan un papel fundamental al perturbar las cadenas de suministro y añadir una capa adicional de incertidumbre.
Principales factores que incrementan la volatilidad
La volatilidad en la industria agrícola es el resultado de una interacción entre condiciones climáticas adversas, cambios en la oferta y demanda global, políticas gubernamentales poco adecuadas, aumento de los costos de producción y otros eventos inesperados, como conflictos bélicos y emergencias sanitarias, por mencionar sólo los factores macro.
Estos factores por lo general actúan de manera combinada para generar fluctuaciones que terminan por afectar a la industria agroalimentaria. Los factores que más peso tienen se explican a continuación:
- Condiciones climáticas y eventos meteorológicos extremos: Las sequías, inundaciones, heladas y tormentas tienen un impacto directo en la producción agrícola. Los eventos meteorológicos extremos pueden dañar los cultivos y reducir la oferta de alimentos, lo que a su vez puede aumentar los precios. Por otro lado, condiciones climáticas favorables pueden llevar a cosechas abundantes y precios más bajos.
- Demanda y oferta global: La demanda de alimentos está influenciada por factores como el crecimiento de la población, cambios en los patrones de consumo y la urbanización. Cuando la demanda supera a la oferta, los precios tienden a subir, y viceversa, siendo que los desequilibrios en la oferta y la demanda pueden deberse a múltiples razones, como problemas de producción en un país importante o cambios en las preferencias de consumo.
- Políticas gubernamentales y regulaciones: Los subsidios agrícolas, los aranceles, las cuotas de importación y las restricciones comerciales pueden tener un impacto significativo en los precios de los alimentos; por ejemplo, la imposición de aranceles a las importaciones agrícolas puede reducir la oferta y aumentar los precios internos.
- Fluctuaciones en los costos de producción: Los costos de producción agrícola, que incluyen el precio de los insumos como fertilizantes, combustible y mano de obra, también contribuyen a la volatilidad de los precios. Si los costos aumentan de manera significativa, los agricultores pueden optar por reducir la producción o aumentar los precios para mantener su rentabilidad.
- Tensiones geopolíticas y eventos inesperados: Tensiones geopolíticas, como conflictos armados o sanciones comerciales, pueden perturbar las cadenas de suministro agrícola y generar incertidumbre en los mercados. Además, eventos inesperados como brotes de enfermedades en cultivos o epidemias en animales pueden reducir la oferta y aumentar los precios de los productos agrícolas de manera repentina.
¿Cómo hacer frente a la volatilidad en la industria agrícola?
Para hacer frente a la volatilidad en la industria agrícola y aprovechar al máximo las oportunidades comerciales es esencial implementar estrategias de gestión de riesgos, las cuales pueden incluir la diversificación de cultivos y la adopción de tecnologías agrícolas innovadoras, por mencionar solo algunos ejemplos, para así incrementar la eficiencia y reducir costos.
Sin embargo, para llevar a cabo estas estrategias de manera efectiva es crucial contar con herramientas y recursos adecuados.
Es aquí donde ProducePay desempeña un papel fundamental, al proporcionar acceso a capital, oportunidades comerciales, información de mercado y mayor visibilidad en la cadena de suministro, con lo cual productores y comercializadores pueden superar con éxito la volatilidad natural de las cadenas de suministro agrícola.
Al trabajar con ProducePay los productores y compradores pueden tener mayor control de sus negocios, al acceder a una red de recursos que les permitirán tomar decisiones más informadas y gestionar mejor los riesgos.
Fuentes: IMF, HSBC, ProducePay, Agronegocios